Cristino de Vera en
Pintura y poesía: la tradición canaria del siglo XX
La exposición Pintura y poesía: la tradición canaria del siglo XX, comisariada por Andrés Sánchez Robayna y Fernando Castro, está producida por el Gobierno de Canarias y se exhibe en TEA-Tenerife Espacio de las Artes.
Tanto el arte como la poesía de Canarias han generado, a lo largo de los tiempos, una peculiar mitografía relacionada con la realidad geográfica, histórica y cultural del archipiélago. Símbolos, imágenes y mitos se dan la mano desde el punto de vista creador. Por otra parte, las artes plásticas y la poesía han mantenido siempre un estrecho vínculo en cuanto a la indagación de la imagen y lo imaginario, y Canarias no ha permanecido ajena a ese hecho.
El objetivo principal de esta exposición es doble: hacer visible el diálogo mantenido por el arte y la poesía en las Islas durante el durante el siglo XX -según el lema clásico ut pictura poesis- y, al mismo tiempo, proponer un acercamiento a ambas modalidades creadoras desde la óptica de la llamada "imaginación material", una dimensión que, gracias a su flexibilidad teórica y a la amplitud de sus intereses críticos, permite una interpretación de los elementos comunes al arte y a la escritura poética, examinando determinados símbolos y mitos y las relaciones que éstos han mantenido de manera fructífera.
Estructurada en diferentes apartados temáticos (el mito, la historia, los cuatro elementos, el signo isla, la luz, el signo cuerpo), la exposición pone de relieve las notables analogías entre los artistas plásticos y los poetas de las Islas, de una parte, y, de otra, cómo unos y otros comparten determinados repertorios simbólicos.
La analogía poesía-pintura y la "poética de lo imaginario" de Bachelard, Durand y otros analistas (en muchos puntos relacionada con C. G. Jung) se entrelazan de manera natural y fecunda. Estamos en este caso, para decirlo en términos muy amplios, ante lo que podríamos llamar los caminos de la imaginación. Se trata de indagar en las líneas internas de sentido que estos aspectos conforman en el seno de la tradición canaria del siglo XX, una tradición en la que artistas y poetas han trabajado codo con codo, hasta el punto de constituir uno de sus rasgos más característicos.
No se pretende aquí hacer historia artística o literaria, y tampoco historia cultural abreviada: la elección de las obras —plásticas y poéticas— aspira ante todo a arrojar luz sobre esos símbolos, mitos e imágenes y a hacerlo de manera sintética. De ahí que queden señaladas en todo momento las matrices culturales de las que proceden las obras, razón por la cual se subraya siempre su entronque con lo más vivo de la cultura nacional e internacional de cada fase histórica del siglo XX.
(Andrés Sánchez Robayna y Fernando Castro, comisarios)